Una Empresa Familiar se define como una empresa en la que una o más familias tienen un papel importante en su propiedad, gestión o ambas. Desde la Cátedra de Empresa Familiar queremos detallar los requisitos para que una empresa sea considerada por Hacienda una empresa familiar pueden variar dependiendo del país y de las leyes y regulaciones locales. Los requisitos que determinan si una empresa es una empresa familiar incluyen:
- Propiedad: Una empresa es considerada familiar si fue fundada y es propiedad de una familia o si un miembro de la familia tiene una participación significativa en la propiedad de la empresa.
- Gestión: Una empresa es considerada familiar si un miembro de la familia tiene un papel determinante en la gestión de la empresa, ya sea como gerente o en otro puesto de liderazgo. Es importante establecer claramente los roles y responsabilidades de cada miembro de la familia en la empresa, incluyendo quién tomará decisiones importantes y quién será responsable de llevar a cabo tareas específicas.
- Historia: Una empresa es considerada familiar si ha sido propiedad y/o ha sido gestionada por miembros de la misma familia durante un período prolongado de tiempo y si los miembros de la familia tienen la voluntad de que siga siendo así en el futuro, es decir trasladar el patrimonio y la gestión de la empresa a la siguiente generación. Es importante tener un plan estratégico a largo plazo para la empresa y asegurarse de que todos los miembros de la familia estén alineados con ese plan porque una adecuada planificación permite ordenar adecuadamente la situación para evitar facturas fiscales inesperadas. Otra característica de las Empresas Familiares es que poseen unos valores y una cultura empresarial muy arraigados dentro de la compañía.
- Comunicación: La comunicación es crucial en una empresa familiar, especialmente cuando se trata de decisiones importantes o conflictos. Es importante establecer canales de comunicación claros y abiertos para evitar malentendidos o tensiones innecesarias. Existen herramientas como el Convenio Regulador o el Consejo Familiar para ordenar la comunicación en el seno de la Empresa Familiar y que marque unas pautas de organización para la sucesión. Es inevitable que surjan conflictos en cualquier empresa, pero pueden ser especialmente difíciles de manejar en una empresa familiar. Es importante establecer un proceso para manejar y resolver conflictos de manera efectiva.
- Tamaño: Algunas empresas familiares son pequeñas o medianas, mientras que otras pueden ser grandes corporaciones. El tamaño de la empresa no es necesariamente un factor determinante para determinar si es una empresa familiar. Por ejemplo Inditex, una de las grandes multinacionales españolas que forma parte del índice Íbex-35, es propiedad de Amancio Ortega, el hombre más rico de España, y de su hija. Que hayan recurrido a los mercados de capitales para conseguir financiación extrabancaria no significa que hayan perdido el control ni de la propiedad ni de la gestión.
En el caso de las compañías cotizadas en bolsa se pueden definir como Empresa Familiar si la familia controlan al menos el 25% de los derechos de voto. Es decir, la familia debe tener un poder suficiente como para continuar influyendo en la gestión y la dirección de la empresa. Otras grandes Empresas Familiares de España son El Corte Inglés, Mercadona, Mango, Puig o Banco Santander, entre muchas otras. Juntas, estas compañías suman buena parte del producto interior bruto y dan trabajo a más de 10 millones de personas solo en España.
Algunas empresas familiares tienen estructuras más formales y se rigen por reglas y regulaciones claramente definidas, mientras que otras pueden ser más informales y depender más de la confianza y del trabajo en equipo de los miembros de la familia.
Ventajas fiscales de la Empresa Familiar
Si se reúnen los requisitos de la Empresa Familiar este tipo de empresas puede gozar de ventajas fiscales dependiendo de la comunidad autónoma. Para evitar el impacto fiscal en dichos tributos para los miembros de la familia empresaria, es de especial importancia que las empresas se puedan calificar a efectos fiscales como “empresa familiar” accediendo entonces al beneficioso régimen fiscal aplicable a las mismas lo que permite la sucesión entre generaciones en la empresa familiar sin un coste fiscal elevado para la nueva generación.
Lamentablemente las definiciones fiscales y las ulteriores sentencias son equívocas cuando no contradictorias y por lo tanto es altamente recomendable que la Empresa Familiar esté adecuadamente asesorada para evitar inesperadas facturas fiscales en el futuro.
Las principales ventajas fiscales de la Empresa Familiar son:
- Exención en el Impuesto sobre el Patrimonio de los socios. Evitando tener que tributar por la titularidad de las acciones o participaciones de la sociedad familiar.
- Reducción del 95% en la base imponible del Impuesto de Sucesiones.
- En caso de donación de las acciones o participaciones a las futuras generaciones, la donación no generaría impacto fiscal en el IRPF del donante.
- En caso de donación de las acciones o participaciones a las futuras generaciones, beneficio en el Impuesto de Donaciones de la reducción del 95% de la base para los donatarios.
Estas ventajas e incentivos se implantan porque de otra manera los impuestos sobre el patrimonio y sobre sucesiones y donaciones amenazarían gravemente la viabilidad de las empresas familiares en España y su mantenimiento dentro del control de la familia a través de las generaciones.
Exención en IRPF de la ganancia patrimonial para el donante. En caso de donación de las acciones o participaciones a la siguiente generación de la familia.
Queda claro que estas exenciones e incentivos fiscales afectan al patrimonio familiar y no al patrimonio personal. Tampoco tiene a efectos fiscales consideración de Empresa Familiar si se trata de una entidad patrimonial es decir si su objeto principal es la gestión de un patrimonio mobiliario o inmobiliario.