Persán, la compañía sevillana especializada en la fabricación de detergentes y suavizantes, ha marcado un hito en su historia con una notable expansión internacional. Tras culminar un ambicioso plan de renovación y desarrollo tecnológico con una inversión de 66 millones de euros, Esta empresa familiar sevillana, ha visto crecer su negocio en el exterior, captando ya el 40% de sus ventas fuera de España en 2018. Esto se traduce en una facturación global de 292 millones de euros el año pasado, de los cuales aproximadamente 116 millones provienen de mercados europeos.
Persán se consolida a nivel internacional
Esta expansión no solo consolida a Persán entre los principales fabricantes de detergentes en Europa, sino que también resalta su crecimiento en mercados como el Reino Unido, Francia, Italia y los Países Bajos, así como en Europa del Este, especialmente en Polonia. Además, la firma sevillana ha logrado un contrato significativo de asistencia técnica para una fábrica local en Polonia, llevando a cabo una transformación radical tanto en tecnología como en productos.
Una de las movidas estratégicas más destacadas de Persán ha sido su entrada en el campo de los distribuidores online, convirtiéndose en proveedor de Amazon y fabricando su marca para toda Europa. Este logro ha abierto un vasto canal de ventas para la empresa a través del gigante mundial del comercio electrónico.
Alianzas con nuevos clientes
Mirando hacia el futuro, Persán ha iniciado un plan quinquenal de expansión internacional a partir de este año, que se centrará en formar alianzas con nuevos clientes y expandir las ya existentes. Este plan contempla la presencia industrial en otros países y la entrada en nuevas categorías de producto, como limpiadores especializados para el hogar y productos de aseo y cuidado personal.
A pesar de una disminución del 5,6% en las ventas en 2018, principalmente debido a cambios en la cadena de supermercados Mercadona, su principal cliente en España, Persán ha logrado incrementar su EBITDA un 16,1%, alcanzando los 19,5 millones de euros. Este éxito financiero se debe en gran parte a su plan de renovación y desarrollo tecnológico, que incluyó la puesta en marcha de un almacén automático y nuevas líneas de envasado, destacando en tecnología de cápsulas mixtas de polvo y líquido.
Además, la compañía ha invertido en investigación y desarrollo, con un nuevo laboratorio donde más de 70 especialistas trabajan en innovaciones, y un laboratorio de marketing para analizar tendencias de mercado con consumidores.
Adquisición de nuevos terrenos en Sevilla
La expansión de Persán también se ha visto en la adquisición de terrenos colindantes a su fábrica en Sevilla, gracias a una modificación del Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad. Este crecimiento físico es un reflejo de su ambición y visión de futuro.
Finalmente, en un movimiento hacia el relevo generacional, José Moya ha iniciado un proceso de transición en la dirección de Persán, colocando a la compañía en una posición privilegiada en el mercado europeo de detergentes. Antonio Somé asume el rol de primer ejecutivo, mientras que Javier y Juan Moya Yoldi toman cargos clave en compras, operaciones, finanzas y sistemas. Con estos cambios, Persán se posiciona no solo como un líder en su sector, sino también como una empresa en constante evolución y adaptación a los desafíos del mercado global.